Cualquier propósito se centra en el animo de hacer o dejar de hacer algo, con la intención de mejorar. En mi caso me decanto directamente por la no acción. En el anterior post hablaba sobre aquellos aspectos que quiero abandonar, pero es que además hemos de tener en cuenta la importancia de toda esa energía que dejo de usar y que ahora tendré disponible para otros empresas. Este es un año, donde sin dejar de atender mis responsabilidades, voy a ser un simple observador, la idea es que la procesión vaya por dentro, que me reconozca todavía más a mi mismo. He de contenerme a la hora de expresarme, salvo que sea de vital importancia hacerlo.
Me veo en un pequeño proceso de hibernación que no se cuanto puede durar, pero tras el nacimiento de mi tercer hijo, mis hábitos y rutinas cambiaron, por lo que no he podido mantener un horario para mis temas, todo se centraba en saber adaptarme al momento, pero actuando como siempre lo había hecho, por lo que he de cambiar de estrategia para que todo cambie.
Este 2023 fue un año raro, ya que si vuelvo la vista atrás han sucedido muchos acontecimientos interesantes, he transitado nuevos caminos, empezado proyectos, pero el devenir de estos acontecimientos no ha sido el que me hubiera gustado, además de que han habido nuevos cambios a la hora de organización familiar que todavía han mermado un poco más mi libertad a la hora de poder hacer mis asuntos. Y digo raro porqué he de encontrar el aprendizaje que me quiere mostrar, para ello es imprescindible centrarme en lo más interno y dejar la expresión para otro momento, ya llegará ese momento de eclosión.
De ahí la importancia de las palabras para 2024, seleccionadas para que me acompañen durante este año y me ayuden para que sea mucho más sencillo y productivo el tránsito por el camino que voy a recorrer. Poner atención a la hora de enfocarme en mi mismo y ser perseverante en esta tarea, no sentirme tentado a abandonar a pesar de los obstáculos que se presenten. Es por ello que quiero limitar mi círculo de acción lo más mínimo y que lo poco que haga sea por mis seres queridos, el resto se quede todo dentro de mi, ya que hay algo que tengo que resolver y no puedo distraerme con el exterior si mi intención es trabajarme a mi mismo.
La mente y el cerebro han de jugar un papel fundamental este 2024, pero he de saber poner el foco en lo que realmente importa, de ahí el hecho de concentrarme en mi, que la acción sea interna, no hace falta que sea percibida por los demás. Es momento de lidiar conmigo mismo, ser dueño de mis decisiones, aceptarlas sin preocuparme de nada, ni nadie más y a partir de ahí ver lo que sucede a mi alrededor, sin juzgar el entorno, sólo observando.
¿Has trabajado tu parte interna? ¿Sabes mantenerte quieto? ¿Te cuesta vivir sin expresarte?