Hay una ley muy importante en la vida que muchas veces pasa desapercibida, pero que se cumple con mucha exactitud. Esta es la ley del ritmo, una ley que seguro que conoces pero que no les has prestado la atención necesaria para comprenderla y así conocerla para que juegue a tu favor, pero sobre todo que no te pille desprevenido cuando haga acto de presencia.
La ley del ritmo es muy simple, la vida es cambio, todo viene y va, tiene su ritmo y hay que saber que este permanece inalterable, la cuestión es reconocer ese ritmo. Dicen que todo lo que sube baja, por ejemplo, y esto es el ritmo, no hay más, así de sencillo, todo tiende a encontrarse en el punto medio, en el equilibrio, pero hasta ubicarse ahí, el movimiento es como el de un péndulo, que va de un lado a otro hasta que logra detenerse.
Con el movimiento del péndulo se ve claramente el ritmo, ya que si este se aleja del punto central, tenderá a irse al otro extremo a la misma distancia, en cambio si el movimiento es más ligero, a penas se aleja del centro, pero siempre oscila de un lado al otro. Lo mismo pasa con las olas, si vienen calmadas, la resaca apenas se siente, pero si hay oleaje, tanto es el empuje hacia afuera como hacía adentro.
Lo mismo pasa cuando nos expandimos y ofrecemos mucho, ya que por la ley del ritmo tenderemos a recibir mucho, ya sea de lo que sea. El ritmo va oscilando entre los extremos, por ello hay que estar atentos en reconocer en el punto que nos encontramos, porque podremos predecir un poco el futuro que nos espera. Cuanto mayor sea el ritmo más cambios se producirán, mientras que un control del ritmo nos hará saber jugar nuestras cartas y saber adaptarnos a lo que venga.
Seguro que conocemos miles de situaciones y hemos experimentado este tipo de cambios, después de la tormenta llega la calma, más tarde o más pronto, pero llega. Si estamos muy activos luego necesitamos un periodo más largo de descanso, lo bueno de la ley del ritmo es que es proporcional, tanto va para un lado como hacia el otro.
Así que hemos de saber cuando agitamos el ritmo que tenemos en nuestra vida, ya que vamos a ir oscilando de un lado a otro y saberlo de antemano nos ayudará a sobrellevarlo mejor. Y esto va muy acorde con la expansión que podamos tener en nuestro crecimiento personal, ya que la fuerza de nuestra onda luego se va a volver contra nosotros, por lo que hemos de empezar a saber como nos pueden afectar esos efectos y así estar atentos, ya que sabemos que la ley del ritmo se va a cumplir.
¿Conocías la ley del ritmo? ¿En que situaciones has experimentado esta ley de primera mano?
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