Los opuestos existen para que podamos reconocer el valor que nos ofrece, la situación o cosa en cuestión. Todos los puestos se diferencian en grado, ya que miden lo mismo. En el caso del post, la luz y la oscuridad se basan en al luz, es decir la oscuridad nos hace valorar la luz y viceversa, ya que gracias a la luz podemos conocer que es la oscuridad. Todo depende del grado de observación y de la medida que tomamos al respecto, aunque lo que está claro es que ambos opuestos se apoyan y se necesitan entre ellos.
La luz se aprecia mucho mejor después de vivir en la oscuridad, es por ello que hemos de saber convivir en el lado oscuro, ya que más pronto que tarde aprenderemos a distinguir el mínimo rayo de luz. A todos nos gusta avanzar y por ello valoramos el paso de la oscuridad a la luz, ya que a la inversa es más complicado. Pasar de un estado a otro nos ciega y necesitamos de un tiempo para adaptarnos a la nueva situación, sin embargo terminamos por hacerlo.
La alianza con la oscuridad
Foto: Charlie Wade