Las entradas de la semana de hace un año no comparten protagonista, pero seguro que le podemos encontrar alguna relación. En la primera reflexiono sobre la palabra medrar. Mientras que en la segunda me apoyo en una frase conocida para darle una pequeña vuelta. Pincha en los títulos de cada uno para volver a leer la entrada al completo.
Medrar a diario
Para empezar dejo la definición y etimologia de esta palabra, a partir de aquí confirmo el porque es necesario hacer caso a la frase que da título al post. Cada día tenemos la oportunidad de seguir progresando y no hemos de desaprovechar ese momento que se nos brinda, ya que nunca sabemos cuando vendrá el final. Medrar es mejorar y este a su vez es fuerte y grande, dos características que hemos de seguir cultivando siempre que podamos y cada día ha de ser mejor que el anterior. Medrar es un entrenamiento que hemos de practicar cada día para que forme parte de nuestro ADN, de esta forma, cuando echemos la vista atrás, nos demos cuenta de todo lo que hemos adelantado, pero para ello hemos de ponernos manos a la obra, desde el minuto en el que abrimos los ojos para levantarnos y comenzar la jornada.
Luces, cambio y acción
En esta entrada hago una metáfora con las películas y como nuestra vida es lo mismo, lo bueno es que somos directores y protagonistas a la vez, pero la cuestión pasa por centrarnos en el papel de director. Primero hemos de poner la luces en el ámbito que consideramos oportuno y para decidir en cual nos vamos a centrar, hemos de tener claro que es aquello en lo que queremos cambiar, ya que la vida es cambio y es aquí donde podremos mejorar, ya que seguir como hasta ahora no es la solución. Para terminar tenemos que pasar a la acción, que es el paso que marca la diferencia, es poner a la práctica todo lo que pasa por nuestra mente, donde nos hemos enfocado y que vamos a cambiar, pero hemos de materializarlo, gracias a la acción, que es la genera movimiento.
Esta vida podemos vivirla como una película, lo mejor de todo es que somos los directores, y al mismo tiempo, somos los que disfrutamos de los que dirigimos, es decir, el protagonista principal. Aunque uno de los temas principales en los que hemos de centrarnos es en el de mejorar cada día. Es en este punto donde se fusionan ambas entradas de hace un año, ya que hemos de preparar las luces, el cambio y la acción para seguir medrando y de esta manera, esta película que estamos viviendo siga in crescendo.
Deja una respuesta