Según la RAE, firmeza y perseverancia del ánimo en las resoluciones y en los propósitos. Esto es lo que significa la palabra constancia. Un concepto que hay que tener muy en cuenta si queremos lograr nuestros objetivos e imprescindible para que nuestro trabajo llegue a buen puerto.
Seguir, seguir, seguir, eso es constancia, no abandonar pase lo que pase; cuantas veces la falta de continuidad ha sido la causa de que no hayamos llegado a cumplir metas que teníamos en mente. Las cosas no se consiguen de un dia para otro, un negocio no se vuelve rentable en un mes, en una dieta no se pueden perder kilos en una semana, no puedes pretender correr una maratón, entrenando durante 7 dias… y podríamos seguir con mil ejemplos, cada uno tiene el suyo propio. Piensa en aquellos objetivos que te has planteado en muchos momentos de la vida y te darás cuenta que en la mayoría de los casos la dejadez ha sido el error más repetido, y la solución ya sabes cual es.
La constancia es una valor que con los años se percibe más claramente. Con la juventud queremos las cosas aqui y ahora, pretendemos conseguir beneficio lo antes posible; con el paso del tiempo nos damos cuenta que las cosas se consiguen poco a poco, hay que saber esperar para cosechar resultados. Palabras como esfuerzo y paciencia (que se encuentran dentro de mi decálogo), van de la mano. La constancia es complicada, ya que muchas veces nos aborda la idea de abandonar, es en ese preciso instante cuando más fuerte hemos de ser, si conseguimos lidiar ese momento, nuestra meta estará mucho más cerca y habremos aprendido una lección muy importante.
A partir de ahora, en cada reto, meta u objetivo que te marques, intenta que la palabra constancia te acompañe, verás como el camino es mucho más liviano, ya que de antemano sabrás que necesitaras un tiempo para conseguirlo y que los beneficios no vendrán enseguida.
Se constante, te hará más fuerte y mejor.