Mucho se habla de los estados alterados de conciencia, pero como me gusta ir un poco a la contra por el simple hecho de reconocer que no hemos de olvidar que siempre hay dos caras de la misma moneda, pues por ello quiero poner la importancia en los estados relajados de conciencia.
Los estados alterados se pueden conseguir de muchas formas, el que este interesado que las busqué, normalmente pensamos en la ingesta de drogas para ello, pero con la respiración también se puede llegar. Pero este no es el tema, la cuestión aquí es observar todo lo que nos pueden aportar los estados relajados, ya que el 16 de este mes tuve la oportunidad de disfrutar otra vez de un baño de gong y esta es una de las conclusiones que saqué.
Antes de empezar con el baño, primero contamos con una meditación en movimiento, se trataba de una clase de YOCHI (Yoga & Chikung) con el objetivo de «Transformar la Energía del Miedo en Paz Interior». Una experiencia nueva para mi, pero que se asemejaba en algunos aspectos al Tai-Chi, y es así como pude comprender mucho mejor esta práctica, donde la respiración y los movimientos son esenciales para entrar en un estado de tranquilidad que me hace experimentar sensaciones y pensamientos que no estoy acostumbrado.
Y me alegro un montón de todo lo que pude descubrir durante esta meditación en movimiento, es lo que tiene tener una actitud de aprendiz y de observación, ya que enseguida me vino a la mente el Tai-Chi, del que estuvo un tiempo haciendo sesiones en casa por mi parte, pero integre mucho más todo lo que significa y la importancia de estar presente en cada movimiento y respiración para que el cuerpo se beneficie de todo lo que aporta.
Luego vino el Baño de Gong, donde tras casi un año pude volver a sentir la vibración de estos instrumentos que, según palabras de Esther de Gong Sounds:
«Los Gongs son los instrumentos elegidos, en la época en la que vivimos, para mostrarnos que en esencia somos Amor y Libertad. Si recordamos ese Núcleo Esencial y elegimos vivir desde ahí, el sufrimiento no tiene cabida en nuestras vidas. Desde ahí conectamos con nuestro poder interno, potenciamos nuestros dones y no nos es posible vivir desde un lugar que no sea pura alegría, serenidad y coherencia, aceptando y abrazando cualquier circunstancia externa que nos llegue como una gran oportunidad para vivir y transitar diversas experiencias, todas con su gran y misterioso regalo.»
Para este baño contamos con 4 gongs relacionados con el Elemento Agua (Luna, Venus, Agua, Eter), además de que los cuerpos estaban muy receptivos debido a la práctica anterior, así que las frecuencias sonoras de los gongs iban a hacer su magia para actuar en mi propio beneficio.
Dicen que cada Baño de Gong es diferente, y este no iba a ser la excepción, ya que en otras experiencias mi mente se dejaba llevar y empezaban a invadirme pensamientos, ideas, recuerdos que se ponían en orden, pero esta vez todo fue mucho más corporal, pude frenar mi mente y los pocos pensamientos que aparecían a penas tenían poder y los desechaba, por lo que estuve mucho más sensible y sensitivo, escuchando mucho más a mi cuerpo. Estas son las palabras que escribía para recordar la experiencia:
«Después de muchas sesiones esta fue la primera donde la mente a penas hizo acto de presencia, estaba muy presente disfrutando del sonido, de las sensaciones y de las Luces que se creaban al tener los ojos cerrados, era como observar las ráfagas de energía de los gongs llegando hacia mi.
Cada pensamiento que venía era capaz de apartarlo y volver a sentir mi cuerpo al 100%, era un estado de paz y quietud como pocas veces he sentido.
Era simplemente estar, no había nada más, pero a la vez lo tenía todo, algo muy reconfortante y agradable.»
Así es como este estado relajado de conciencia me descubrió un poco más lo que hay en mi subconsciente en este momento en el que me encuentro y la sensación de paz, de vacío la comparto, aunque mentalmente el trabajo no cesa, a diferencia de otras épocas, parece ser que me encuentra más en paz conmigo mismo y reconociendo lo que hago, lo que me hace ser más consciente y por lo tanto estar más en calma.
¿Has vivido alguna de las experiencias que cuento? ¿Qué prefieres, estados alterados o relajados?
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