Me gusta jugar con las palabras y que la gente tenga que volver a leer la frase para que le preste la atención necesaria, ya que de esta forma es como de verdad se comprenden las cosas. El título puede resultar repetitivo y es curioso, como habrá mucha gente que volverá a leerlo y pensará que ya lo ha hecho y con eso basta, habrá otro grupo de personas que lo leerán una tercera vez y entonces empezarán a reflexionar sobre toda la información que puede aportar esa frase tan corta.
El cerebro de cada persona actúa de una forma determinada, pero los sistemas internos y la forma de proceder es igual para todos. El título ha de poder leerse varias veces para comprender que, dicho de otra forma, no somos conscientes de lo que insconscientes que somos. Con esta nueva frase el cerebro lo ve un poco más claro y se le despejan dudas, ya que antes la utilización de la misma palabra nos hacía entrar en un pequeño laberinto, pero ahora, ya parece que todo tiene más sentido.
Con este pequeño ejemplo es como quiero demostrar lo inconscientes que somos, ya que no sabemos lo que sucede en nuestro interior, pero es que para profundizar un poco más, no sabemos el poder que ejerce nuestro inconsciente en nuestra consciencia. Pensamos que controlamos nuestros pensamientos, pero estos están originados por otros anteriores, por ideas y todo esto se nos escapa, pero parece ser que no queremos verlo. De esta forma nos sentimos poderosos cuando tomamos una decisión y pensamos que nadie nos ha condicionado ni nada, que nosotros mismos somos dueños de lo que sucede en nuestra mente. Lo que pasa es que no queremos ver la realidad y esta pasa por reconocer que somos muy ignorantes sobre el funcionamiento de nuestro cerebro y como estamos más condicionados de lo que pensamos. Pero no en el sentido negativo de la palabra, ya que mucha gente puede pensar que estamos siendo manipulados y no es así, lo que pasa es que tenemos miles de ideas y pensamientos inconscientes que juegan un papel fundamental a la hora de como nos comportamos y vivimos, pero es complicado llegar a percibirlos.
Parece mentira, pero a medida que nos volvemos más conscientes, es cuando más cuenta nos damos de lo inconscientes que somos. Para revertir esta situación hemos de mantener los ojos bien abiertos y buscar el origen de nuestros pensamientos, profundizar en el porqué, hay que autoconocerse, redescubrirse, sólo así tendremos una pequeña idea de este complejo mundo interno.
¿Porqué piensas lo que piensas? ¿Eres consciente o inconsciente?
Foto: Ross Lera
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