El conocimiento fue el protagonista de las entradas de la semana de hace un año. En la primera hablo sobre el efecto Dunning-Kruger, que por si no lo conoces, seguro que te llama la atención. Mientras que en el segundo reflexiono sobre la idea contraria, donde a medida que más sabemos, más cuenta nos damos de lo ignorantes que somos. Pincha en cada uno de los títulos para leer el post al completo.
El no saber que te hace creer saber
El título es muy llamativo, pero es que es una realidad que sucede más de lo que pensamos. Hay una frase muy celebre que es «sólo sé que nada sé» y es que los sabios llegan a esta conclusión, ya que el conocimiento y la información es tan vasta que es imposible saberlo todo. La cuestión es que hay gente muy segura de si misma que piensa que sabe todo sobre cierto tema y no sé da cuenta de que el hecho de tener esta creencia, hace que no pueda aprender más, el mismo se pone los límites. Se conoce como el efecto Dunning-Kruger, en el que cuanto menos sabemos, más listos nos creemos, aunque esto es algo que puede suceder por inconsciencia y en algún momento hemos pasado por él. Así que lo importante es reconocerlo para no caer en él.
El conocimiento que te hace consciente
En este post es donde cito la frase de Sócrates, y es que es una frase que deberíamos de grabar en nuestra mente, así no iríamos de listillos por la vida. Somos ignorantes de base y lo somos durante toda nuestra existencia y esto es algo que tenemos que saber reconocer para vivir más felices. Ser conscientes es más importante de lo que pensamos, pero llegar a ello es una tarea complicada, ya que a veces cuesta aceptar ciertos puntos. Lo que está claro es que no podemos saber de todo, esto es muy complicado, existen mentes privilegiadas que saben mucho, pero incluso ellos son ignorantes en muchas materias. Hemos de especializarnos en aquellos temas que más nos interesen, siempre siendo conscientes de nuestros límites y de que a medida que vamos conociendo un asunto en cuestión surgen nuevas dudas que nos hacen ver lo ignorantes que todavía somos.

El saber no ocupa lugar, pero hay demasiada información y conocimiento en el mundo, por lo que hemos de saber centrar nuestros esfuerzos en aquello que nos haga progresar y para lo que somos buenos. Y el hecho de pensar que somos ignorantes, nos mantendrá en una actitud de aprendiz que nos hará siempre seguir aprendiendo en cualquier situación.
Deja una respuesta