La intención a la hora de insultar o estar exultante

En el anterior post conocíamos de forma más profunda los conceptos de insultar y exultar, así podemos saber de primera mano las diferencias que hay entre ellos. La cuestión es que ambos verbos necesitan un emisor y un receptor, donde hay un aspecto que tenemos que destacar y que puede cambiar el significado de la acción, si hay intención o no.

La intención de insultar

En la mayoría de situaciones, se insulta con el ánimo de ofender a alguien, esta es la meta que se persigue, pero hay que tener en cuenta que la persona que recibe el insulto también tiene algo que decir, y depende de ella sentirse insultada o no. Dependiendo del papel que desempeñamos hemos de tener en cuenta esto que digo, ya que en mi caso no me gusta tener que insultar a nadie, mientras que si soy el que receptor, intento que no me ofenda. Aunque hay un caso extra donde alguien insulta sin querer, pero el otro se siente insultado. Por ello le doy tanta importancia a la intención que ponemos y la actitud que tenemos ante una situación de insulto, ya que es la que al final define como nos sentimos, ya seamos emisor o receptor.

Exultar sin intención

Por otro lado tenemos a aquella persona que vemos exultante, y esta actitud suele mostrarse sin intención, es más, es la gente de nuestro entorno es la que nos califica como tal, ya que la expresión de alegría hace que así sea. En este caso dependemos mucho de la opinión de los demás, ya que a pesar de que nuestra intención sea mostrar ese grado de alegría, pude que la gente no lo considere así.

Que la gente nos vea como alguien exultante, o como algo insultante, depende de lo que cada uno piense, es algo subjetivo. De la misma forma que cuando queremos insultar o mostrarnos exultantes, hemos de poner intención en ello. En ambos verbos la actuación y opinión, tanto del emisor como el receptor son importantes, así que tenlo muy claro, a pesar del papel que desempeñas, depende de cada uno tomarse las cosas de una forma u otra.

¿Sueles insultar? ¿Has sido insultado? ¿Cuando fue la última vez que te viste exultante?

Foto: Nayshot


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